La historia de superación del caballo de carreras Seabiscuit me sirvió de inspiración para la creación de mi empresa.
Yo creo que todos tenemos un gran potencial dentro, que con los recursos adecuados podemos desarrollar al máximo.
Seabiscuit fue un caballo de carreras aparentemente consumido y sin grandes aptitudes que se convirtió en una leyenda para los ciudadanos de Estados Unidos durante los difíciles años de la gran depresión. Los americanos vieron en su historia un símbolo del espíritu de superación.
A lo largo de 1937, Seabiscuit acaparo más titulares de prensa que el propio presidente Roosevelt y llegó a obtener ganancias por valor de 438.000 dólares, sesenta veces más el coste de su compra. Todo gracias a tres personas que decidieron apostar por él: un empresario arruinado, un atípico entrenador y un jockey ciego de un ojo. Tres hombres que aún arruinados y fracasados ellos mismos supieron reconocer el potencial que tenía el animal y al que todos daban por acabado.